Año 1799. Napoleón Bonaparte, después de la victoria en la batalla de las Pirámides, lleva 14 meses gobernando el país como Comandante en Jefe. En Francia, la Revolución era un fracaso y Napoleón tenía que regresar a casa porque todo cuando apreciaba parecía desmoronarse. Pero antes de regresar, tiene un enigmático encuentro en la gran pirámide que estará relacionado con uno de los grandes misterios sobre la figura de Napoleón, la ubicación de su gran tesoro cuyo secreto se llevó a la tumba. Napoleón saqueó “Europa, robando cantidades incalculables de metales preciosos, joyas, antigüedades, cuadros, libros y esculturas, cualquier cosa de valor”. Había ocultado sus expolios en un lugar que solo él conocía.
En la actualidad, el ex agente Cotton Malone recibe en su librería de Copenhague la visita de Sam Collins, un agente de los servicios secretos estadounidenses que acude en busca de ayuda al ser perseguido por dos asesinos. Sam ha tenido que huir de su país porque se ha puesto en el punto de mira de sus superiores al crear una web conspiratoria en la que denuncia los movimientos de grupos y sociedades secretas que manipulan el mundo en la sombra. Las investigaciones de Sam le han llevado a descubrir la existencia del Club de París, un grupo de millonarios que manipulan la economía global pretendiendo causar grandes estragos en los sistemas financieros mundiales.
Sam cree que la clave para descubrir la verdad la tiene Henrik Thorvalidsen, “un hombre de una riqueza, un poder y una influencia incalculables. Pocos Jefes de Estado o coronas imperiales rechazaban sus peticiones”. Henrik es amigo de Cotton y les une un trágico episodio ocurrido dos años antes, desde el que Henrik solo tiene un propósito en su vida, la venganza. Había trazado un meticuloso plan y había llegado el momento de ponerlo en práctica.
Al mismo tiempo, Eliza Larocque, una enigmática y poderosa mujer, perteneciente a una antiquísima familia acomodada corsa, recorre el mundo para formar un grupo de millonarios con una oferta irresistible, ofrecer estabilidad en el caos económico que vive el mundo. Erika colabora con otro personaje poderoso, Graham Ashby, un reconocido financiero inglés, que llega a Córcega para resolver un misterio que había atormentado a los cazatesoros durante más de sesenta años, la ubicación del mayor tesoro de la Segunda Guerra Mundial.
Las tramas relacionadas con estos personajes se terminarán uniendo en una historia cuyas raíces se remontan a la época de Napoleón y en la que encontraremos avaricia, terrorismo, sed de poder, venganzas, conspiraciones, códigos, profecías, tesoros escondidos, traiciones, manuscritos antiguos, la novela tiene todos los ingredientes para hacernos disfrutar desde el principio hasta el final al mismo tiempo que encontramos una dura crítica a los abusos del sistema financiero que rige en el mundo occidental. En medio encontramos al protagonista, Cotton Malone, un personaje duro, valiente y decidido, que arrastra los fantasmas de un pasado que vamos conociendo a lo largo de la historia.
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