El destino de una reina, de Allison Pataki (Espasa, 2021) es una novela histórica que nos acerca a un personaje fascinante y poco conocido, ofreciéndonos así un original y seductora historia sobre la mujer que conquistó el corazón de Napoleón, forjó una dinastía y cambió el curso de la historia.
La autora, una de las voces femeninas más destacadas dentro del género de novela histórica, cuyas obras han aparecido en la lista de los más vendidos de The New York Times, relata con maestría la historia de una protagonista única que existió de verdad: Désirée Clary, una mujer fuerte, decidida y apasionada que se convirtió en la piedra angular de la dinastía Bernadotte, que hasta la fecha reina en Suecia.
En una nota final clarificadora, Allison Pataki explica cómo se despertó su interés por un personaje que siempre ha permanecido en un segundo plano, apareciendo como personaje secundario en los libros, pero que bien merece ser protagonista como es el caso de El destino de una reina, una novela narrada de forma exquisita y que nos permite asistir a una época apasionante de la historia situados en primer fila gracias a un personaje que fue testigo y protagonista de la misma.
Désirée Clary, hija de un rico y noble mercader, es la prometida de Napoleón Bonaparte, quien, al conocer en París a Josefina Beauchamp, rompe el compromiso. Tras años de magníficas relaciones y casada con el célebre militar Jean Baptiste Bernadotte, éste deja de apoyar a Napoleón y, cuando se lo proponen, acepta ser el nuevo rey Suecia. Désirée se convierte así en reina de Suecia, y su hijo, Óscar, en el príncipe heredero.
Sin embargo, el destino unirá de nuevo la vida de Napoleón y la de Désirée, pues la elegida para contraer matrimonio con Óscar será la nieta de Napoleón y Josefina. Su unión inicia una dinastía monárquica cuyos herederos reinan en Suecia hasta hoy en día.
Apasionante como The Crown, seductora como Forastera.
La novela comienza en el año 1860 con la protagonista al final de sus días, recordando cómo a lo largo de su vida había portado "muchos mantos, coronas y nombres diferentes", gobernando hombres y reinos y habiendo aprendido algo vital, cómo sobrevivir.
Y la trama retrocede hasta 1789, año desde el que iremos acompañando a la joven Desirée a lo largo de su fascinante vida mientras vamos conociendo esos mantos, coronas y nombres que portó, qué hombres y reinos gobernó y cómo consiguió sobrevivir en medio de un juego de pasiones, sospechas, conspiraciones y revoluciones.
Justo cuando estalla la Revolución Francesa Desirée, con 11 años, se encuentra junto a su hermana en un convento en el sur de Francia en un episodio en el descubrimos su capacidad para buscarse la vida con picaresca. Pero los acontecimientos que vive su país y el gobierno del Terror sitúan a su familia en una situación complicada porque, aunque no son nobles, pertenecen a la clase más alta de comerciantes siendo más ricos que la mayoría de los aristócratas que habían pasado por la guillotina.
Desirée quiere vivir al margen de lo que está sucediendo pero la dura realidad acaba alcanzándola y tendrá que tomar un protagonismo que cruzará su camino de forma providencial con el de los hermanos Bonaparte, uniendo así los destinos de ambas familias. Napoleón y su hermano José entrarán así en sus vidas transformándolas para siempre.
El matrimonio entre su hermano y José Bonaparte, unido a su relación apasionada con Napoleón, hacen presagiar una estrecha relación entre los Clory y los Bonaparte, pero la aparición de Josefina truncará los planes de una Desirée que tendrán que reinventarse y aprender a Lidia con una mujer de carácter firme e implacable, dispuesto a luchar sus propias batallas mientras su marido libras las suyas para conseguir más gloria y poder.
Comienza así un juego de intereses entre los diferentes personajes mientras Desirée irá manteniendo su lugar de privilegio, aunque siempre a la sombra de Josefina y bajo la atenta mirada de Napoleón. La aparición del militar Bernadotte dará un giro radical al destino de la protagonista, no exento de peligros e intrigas hasta convertirse en la reina de Suecia con una dinastía que continúa hasta la actualidad.
El relato resulta muy entretenido, la autora se maneja con maestría en el género histórico, describiendo con detalle el escenario histórico y los grandes acontecimientos alrededor de la figura de Napoleón y deteniéndose también en el perfil más humano de casa personaje, mostrando las complejas relaciones entre ellos, mientras juegan sus cartas alrededor del emperador. En medio de todo, destaca la figura de una mujer que ha sido olvidada injustamente y que esta novela rescata para darle el mérito y el lugar que merece, desvelando el importante papel que jugó en una época apasionante, que todavía sigue dándonos gratas sorpresas.
