Estamos ante un libro con un formato sencillo y práctico, que nos presenta las entradas ordenadas por orden alfabético, lo que facilita la consulta. Y es que este Diccionario podemos leerlo de continuo desde la primera página, pero especialmente es una obra de consulta, ideal para tener a mano en cualquier momento y solucionar dudas, enriqueciendo así nuestro lenguaje. Un índice final de palabras claves para buscar los dichos y frases, completa con acierta una herramienta útil y práctica.
La lectura de este libro es una delicia, un canto al lenguaje y a su riqueza, explicando el significado y origen de cada dicho. Podría ser una obra densa, tediosa, pero el estilo es fresco, ameno y coloquial, permitiendo que el lector no solo aprenda, sino que también disfrute con la lectura.
El autor nos ofrece un libro que se acerca a cada frase desde varias perspectivas, no solo léxica o semántica, sino también histórica y sociolingüística. De esta forma, el cuadro es completo para facilitar nuestra comprensión.
Es un libro asequible, no como otros de este estilo que “no hay por dónde cogerlos”. Con este, no hace falta “leer entre líneas”, aunque corremos el peligro de comenzar a devorarlo y “comernos las palabras”. Lo mejor es que no lo pienses más, “no te andes por las ramas” y “ni corto ni perezoso” te sumerjas en sus páginas.
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1 comentario:
Muy interesante, sí señor. Gracias.
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