“La caída de los gigantes”, de Ken Follet (ed. Plaza & Janés, 2010) es el esperado primer título de la Trilogía “The Century”. En esta trilogía el autor narra “los destinos entrelazados de tres generaciones de cinco familias: una galesa, una inglesa, una rusa, una alemana y otra estadounidense”. El primer volumen, una descomunal novela, está ambientado en la Primera Guerra Mundial y en la Revolución Rusa. La siguiente se centrará en la Segunda Guerra Mundial y la tercera en la Guerra Fría.
Afronté la lectura del libro con ilusión, esperando encontrar un relato igual de fascinante que “Los pilares de la tierra”, obra cumbre del autor no superada por su continuación “Un mundo sin fin”. Mi conclusión al finalizar el libro es que Ken Follet ha conseguido otra magnífica novela, personalmente creo que se encuentra a la altura de “Los pilares”, manteniendo la complejidad de los personajes y un juego de intrigas y conflictos que nos enganchan desde el principio. Además, la novela tiene un aliciente más, ya que se ambienta en un período menos transitado en la novela histórica, al contrario de lo que ocurre, por ejemplo, con la Edad Media, pero igual de “convulso, violento y determinante”. El conflicto de la Primera Guerra Mundial resultó crucial para el desarrollo del siglo XX y sigue siendo actual, tal y como lo demuestra la noticia aparecida menos de una semana después de la publicación de la novela, en la que se informaba sobre el pago por parte de Alemania de la última cuota de la deuda impuesta por los vencedores en el Tratado de Versalles como reparación por las consecuencias de la Primera Guerra Mundial. Se podría decir que dicha guerra ha “terminado” en el mes de octubre del 2010.
Es complicado realizar una reseña del libro para que puedas hacerte una idea de su contenido. Realizaré un recorrido por las cinco familias protagonistas para tener una idea de “los pilares” sobre los que se cimenta la narración.
Los Williams, la familia galesa, serán los primeros protagonistas. Su historia comienza el 22 de junio de 1911, el día en el que el que Jorge V fue coronado rey. Billy Williams cumple ese mismo día 13 años de edad y bajará por primera vez a la mina, donde también trabaja su padre David, un socialista sindicalista y temeroso de Dios. Esta familia nos hará descubrir las duras condiciones de vida de los mineros, sus luchas y huelgas en defensa de sus derechos. También asistiremos al enfrentamiento de Billy con el legalismo religioso de su padre, ya que el joven, con la Biblia en la mano, señala que “nuestra fe habla de redención y piedad, no de guardarse las cosas dentro y castigar a los demás”. Este conflicto dará lugar a episodios y reflexiones de gran interés.
Ethel, hermana de Billy, a la que éste adora, será el nexo de unión con la familia inglesa de los Fizherbert. El conde de Fitzherbert, al que llaman Fitz, es un joven de 28 años, que ocupa el noveno lugar entre los hombres más ricos de Gran Bretaña. Es el heredero de la explotación de las minas de carbón donde trabajan los Williams. Tenía gran apego por las tradiciones y el orden establecido. Su esposa Bea, princesa rusa, es una mujer de carácter irascible, egoísta, “concentraba todas sus energías en complacer sus propios antojos y en salirse siempre con la suya”.
Los Fitzherbert se preparan para la visita a su casa de campo del rey Jorge. Fitz prepara una velada con jóvenes de diferentes países, distinguidos, la élite dirigente del futuro y cuida todos los detalles para que nada salga mal. Fitz ve esta visita como una oportunidad para comenzar su gran sueño, fundar una “insigne dinastía anglorrusa cuyo dominio se extendiese hasta los últimos confines de la Tierra”. Para ello necesitaba un heredero, pero el bebé deseado no terminaba de llegar. Justo antes de que llegue el rey, enferma su ama de llaves y se hará cargo de todos sus preparativos su ayudante, Ethel Williams. Fritz, un mujeriego sinvergüenza, no tardará en fijar sus ojos en la sirvienta.
Además, Fritz tiene una hermana, Maud, con la que le une una estrecha relación al quedarse huérfanos y tenerse únicamente el uno al otro, pero cuyas ideas liberales y feministas les enfrentan y pueden estropear la velada. Finalmente, la cena resulta todo un éxito y en la velada posterior se produce una interesante conversación sobre la situación del continente europeo al borde una guerra. Tres de los participantes en esa velada, el americano Gus Dewar y los primos Walter y Robert von Ulrich (alemán y austriaco, respectivamente) nos adentrarán en otras dos familias protagonistas.
Gus, hijo del Senador Cameron Dewar, es un joven atrevido, sin pelos en la lengua, que se encuentra realizando un viaje por el mundo y que a su vuelta a Estados Unidos pasará a formar parte de los consejeros del presidente. Es un “animal político” al que “nada fascinaba tanto como las relaciones entre naciones, el odio y las amistades, las alianzas y las guerras”.
Por otra parte, tenemos a los von Ulrich. Walter es agregado militar de la embajada alemana en Londres, una figura emergente, un patriota que “sentía de forma apasionada que no existía vocación más alta que servir a su país”. Consideraba que el ejército alemán tenía que estar a la vanguardia de la tecnología y el armamento. Tenía una mentalidad abierta, aunque también a veces era convencional y mantenía una relación sentimental con Maud, hermana de Fritz.
Finalmente, conoceremos a la quinta familia, en Rusia, durante un viaje de Gus y Fritz. Grigori Peshkov, obrero metalúrgico, tiene un trágico pasado relacionado con la princesa Bea. Se había convertido en cabeza de familia con 16 años. Es un hombre honesto y digno de confianza, trabaja duro y serio en contraste con su hermano Lev, informal, egoísta y siempre al margen de la ley. Grigori había hecho de padre y madre para él. Grigori sueña con ir a trabajar a Nueva York, confiado en que todo en Estados Unidos será muy diferente a Rusia, creyendo que allí podrá encontrar la justicia y la igualdad que en su país brilla por su ausencia. Sus ilusiones se vendrán abajo al tener que realizar un sacrificio por amor de a su hermano, renunciando así a sus sueños. Lev, con remordimientos, intentará devolverle el favor a su hermano, aunque su carácter y sus vicios no le ayudarán a conseguirlo.
La novela comienza con un ritmo lento y poco a poco, de forma magistral, el autor nos va presentando a los protagonistas de las cinco familias, descubriendo las relaciones entre ellos y tejiendo las intrigas, odios, amores y desamores que se irán desarrollando a lo largo de la historia de forma apasionante. También iremos conociendo a los héroes y a los villanos, pertenecientes a diferentes clases sociales, desde la nobleza hasta el más pobre obrero, que protagonizarán todo tipo de episodios que nos engancharan mientras asistimos a un despliegue de injusticias, abusos de poder, antisemitismo, luchas heroicas, traiciones, desigualdades entre clases sociales y sexos, defensa por los derechos de las mujeres, racismo, etc. Descubriremos las injusticias de un mundo en el que unos pocos poderosos protagonizan un “juego de poder que se libraba en el tablero internacional” y cuyas decisiones afectarán a los ciudadanos de a pie y a los más pobres, que pagarán las consecuencias de decisiones en muchos casos irracionales.
En el transcurso de los acontecimientos que desembocaron en la guerra, descubriremos a personajes que se dejaron la piel para evitar la contienda y a otros que anhelaban que estallara el conflicto. Tristemente, como ya sabemos, los que apoyaban la guerra triunfaron definitivamente, sumiendo al continente en un conflicto sangrante. De la mano de algunos de los personajes asistiremos a conversaciones y encuentros con las figuras históricas claves del momento, también al juego de espionaje entre los servicios secretos y viajaremos también al frente de batalla, viviendo en primera persona el horror , la brutalidad y la sinrazón de esta guerra de trincheras, produciéndose episodios casi surrealistas, como una confraternización entre soldados ingleses y alemanes que provoca la alarma entre sus superiores. También seremos testigos del triunfo de la revolución en Rusia, cuyo momento culminante afectará a varios de los personajes, especialmente a Grigori, a quien acompañaremos en una serie de episodios llenos de tensión, crueldad y dramatismo. Será una parte final del libro en la que las figuras de Lenin y Trotski cobrarán un papel protagonista.
El juego de alianzas y rivalidades entre los diferentes países está descrito de forma excelente y la novela irá narrando cómo el desarrollo de los acontecimientos a nivel internacional creará serios conflictos y rivalidades en las relaciones familiares y sentimentales de los protagonistas. Los caminos de los miembros de las diferentes familias se irán cruzando de forma original y convincente como piezas de un puzzle que se va componiendo a lo largo de la novela.
Llegaremos a un final plagado de episodios emotivos , con un Tratado de Versalles cuyas estipulaciones humillantes para Alemania desembocaron en la Segunda Guerra Mundial y que, como señalé al principio de la reseña, sus consecuencias llegan hasta la actualidad.
El único pero que le encuentro a la novela son las excesivas escenas de sexo gratuito y en muchas ocasiones, zafio, que no aportan nada a la narración. Pero, hecha esta salvedad, estamos ante una gran novela en la que el autor, como ya ocurrió en “Los pilares de la tierra”, y algo menos en “Un mundo sin fin”, demuestra tener una capacidad magistral para tejer historias protagonizadas por personajes que representan las grandes virtudes y miserias del ser humano.
Ya sólo queda esperar a la publicación del siguiente título de la Trilogía…
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5 comentarios:
Me parecio muy interesante su resena sobre La Caida de los Gigantes, creo que sera mi proxima lectura. Chequeare tambien su pagina web como una de mis favoritas, creo que puede aportarme mucho
¡Genial, Matilda!
Espero que disfrutes con la lectura de la novela. Es todo un privilegio que pongas el blog como uno de tus favoritos, espero que pueda serte de ayuda su contenido
Seguro que es un libro genial, me han hablado muy bien de él y por lo que me han dicho está a la altura de "Los pilares de la tierra".
¡Gracias por la recomendación!
He leido TODO de Ken Follet y este libro me ha decepcionado. Demasiada historia, demasiada guerra, muchas vueltas sobre lo mismo...nada de lo que me esperaba, partiendo de que todo lo anterior de este escritor me habia encantado. Una pena...
Es una novela apasionante que narra a la perfección los acontecimientos de principios del siglo XX. Merece la pena. Pero, ¿Para cuando la segunda entrega?
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