“La lanza sagrada”, de Craig Smith (ed. Algaida, 2010) es un thriller histórico que nos acerca a la obsesión que los nazis tuvieron por conseguir reliquias de poder que les ayudasen a ganar la guerra e imponer el tercer Reich.
La novela se desarrolla principalmente en dos épocas diferentes, los años 1931 y 2008. En la década de los años treinta, encontramos a Otto Rahn, un personaje enigmático cuya relación con los nazis y su muerte siguen siendo un misterio. Rahn se encuentra en Carcasona investigando para escribir un libro sobre los cátaros y el tesoro legendario que escondieron. En Francia, conoce a un peculiar matrimonio a quienes invita a acompañarle en su viaje por castillos y cuevas reconstruyendo la verdadera historia de los cátaros. Años después, la publicación de su libro despertará el interés de los nazis y Himmler contactará con Rahn ofreciéndole amplios fondos para “viajes, investigaciones y expediciones”. Esta parte de la historia nos mostrará los intentos de Himmler y las SS por hacerse con todo tipo de objetos de supuesto poder y nos hará viajar hacia uno de los lugares más enigmáticos y tenebrosos de la historia, el castillo de Wewelsburg.
La narración de las aventuras de Otto Rahn se alternará con otras historias que se desarrollan en el año 2008 y cuya relación con Rahn y el nazismo iremos conociendo conforme avanza la novela. En primer lugar nos situamos en Zurich, durante la fiesta de inauguración de la Fundación Roland Wheeler. Roland fue un enigmático personaje, fallecido un año antes. Con un pasado turbio, se convirtió en un hombre respetable, trabajando en una galería de arte en Hamburgo. Se trasladó a Zurich, donde se hizo extremadamente rico. Se rumoreaba que había amasado su fortuna robando cuadros en otros países y vendiéndolos a coleccionistas suizos.
Supuestamente, el relevo del negocio lo había tomado su hija Kate, quien se encuentra al frente de la organización. Kate es una de las escaladoras más famosas de Suiza y arrastra un episodio trágico ocurrido once años antes en el monte Eiger. Mientras disfrutaba del viaje de novios escalando la montaña con su marido a quien conoció seis meses antes, fueron asaltados por unos desconocidos. Kate sobrevivió milagrosamente, pero quedó viuda y en la ruina, al quebrar repentinamente la empresa de su marido pocos meses después de su muerte. Once años después, Kate sigue buscando a las personas que ordenaron asesinar a su marido. Descubrirá que se enfrenta a enemigos poderosos, pero no se acobardará ante ellos.
El otro protagonista de la narración que se desarrolla en el año 2008 es Thomas Malloy, agente de la CIA que vuelve a la acción después de una década sin hacer trabajo de campo. Debe cazar a Jack Farrel, un antiguo conocido al que intentó captar en el pasado para entrar así en las familias criminales más importantes de Europa. Farrel ha escapado después de robar 500 millones de dólares y se encuentra acompañado de una implacable asesina. Malloy tendrá que darles caza, para lo que deberá hacer uso de toda su experiencia como agente y del conocimiento de los bajos fondos de los principales países de Europa.
Estas tres historias, aparentemente sin conexión, están relacionadas y, una vez completo el puzzle, entenderemos las claves de los acontecimientos que se desarrollan. Descubriremos la existencia de La Orden de los Caballeros de la Lanza Sagrada, las maquinaciones de unos personajes que intentan “cambiar el mapa político de occidente” y las diferentes teorías sobre la
La Lanza de Longinos, la reliquia más popular de la Europa del Medievo. Hitler creía que quien la poseyese tendría en sus manos el destino del mundo. En 1938 sacó de Austria la que él creía la verdadera, pero ¿era realmente la lanza que traspasó el costado de Jesús y tenía el supuesto poder que se le atribuía?...
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1 comentario:
¡¡Hola, amigo!!
me encanto tu blog bueno espero que te puedas pasar por el mio alguna vez que tengas tiempo bueno es hora de despedirme me encanto escribirte y pues. te espero por alguno de mis dos blogs bie chico te cuidas...♥
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