Nuestra casa

 Juramos confiar el uno en el otro. Pero ambos estábamos mintiendo.

 Nuestra casa, de Louise Candish (Planeta, 2021) nos ofrece una trepidante lectura con una obra ganadora del Premio British Book Award al mejor thriller del año. 

Estamos ante un thriller psicológico adictivo, de esos que te atrapan desde la primera página, con un esquema original y una trama sorprendente que nos envuelve con un juego de secretos y mentiras a través de los relatos de los dos protagonistas que nos van ofreciendo dos perspectivas complementarias de su historia y en cuyos detalles y revelaciones el lector tendrá que juzgar y e ir haciendo sus propias hipótesis sobre la verdad de una historia redonda, con un final a la altura del resto de la novela. 

Louise Candlish estudió Lengua y Literatura en el University College de Londres y trabajó como redactora y editora de libros ilustrados antes de dedicarse plenamente a la escritura. En la actualidad vive en el sur de Londres con su esposo, su hija adolescente y Bertie, su perro labrador.

Autora de doce novelas y traducida a más de quince idiomas, Nuestra casa ha sido galardonada con el British Book Award de 2019 a Mejor Thriller del Año, además de ser reconocida por una gran cantidad de medios como novela negra del año.

 

El comienzo de la novela ya resulta cautivador. 

Por una parte, encontramos a Fiona Lawson dirigiéndose hacia su gran casa que comparte con su marido, del que se ha separado hace unos meses de forma civilizada, mirando también por la estabilidad de sus dos hijos pequeños. 

Pero Fi se encuentra la casa vacía de todos sus muebles y con dos nuevos propietarios que le han comprado la casa a su marido, después de que este la haya vendido sin su conocimiento ni consentimiento. 

Cuando ya creemos habernos situado en la trama, ésta da un giro y nos lleva hasta Ginebra, donde encontramos a Abraham Lawson, el marido de Fiona, en la habitación de un hotel, sintiéndose como un fugitivo que va "a la deriva por sus propios actos" después de dar un salto al vacío por haber vendido su alma. 

A partir de este momento, seguiremos el relato de lo que sucede en Londres y en Ginebra, pero también de la mano de los dos protagonistas de una forma muy original. Fiona contará su historia a través de un podcast sobre crímenes en el que tiene su propio espacio "La historia de Fi". 

Fiona relatará cómo ha llegado a esta situación y, a pesar de ser muy celosa de su intimidad, compartirá su historia para advertir a otras mujeres que puedan verse en situaciones similares y por si alguien tiene información útil para su caso que sigue abierto. Aunque no tiene esperanzas respecto a su marido, al que imagina viviendo a lo grande con nueva identidad, nueva casa y nueva vida, gracias al nuevo tesoro conseguido con la venta. No sólo no tiene esperanzas, sino que amenaza con matarlo si vuelve a verlo. Después de cada relato de Fi conoceremos también las reacciones de los oyentes y unos comentarios con los que el lector podrá o no coincidir y que añaden otro ingrediente más de interés y originalidad a la novela. 

Pero Abraham, Bram, tiene su propio relato sobre lo sucedido, sus motivaciones y su relación con una mujer a la que "nunca ha dejado de amar" y que comparte a través de un documento de Word que envía como una "nota de suicidio".

De forma alterna van presentando las piezas de su historia, una relación que gira en torno a unos hijos cuya situación, en principio,  desconocemos y, especialmente, a una casa que se había convertido en el eje central de la familia, su protección, su refugio e incluso identidad, y que será una protagonista más de la novela que contendrá los secretos y las claves para desentrañar la madeja de la trama, y el objeto de discordia y deseo de los otros dos protagonistas, convirtiéndose también este elemento en una acertada crítica social. 

Y así, página a página, de esta forma tan original y atractiva, vemos cómo se desmorona de forma patética una relación matrimonial y una familia,  asistimos a cómo las decisiones que tomamos y nuestras acciones tienen consecuencias, aunque queramos obviarlo. Mientras tanto, se van presentando las diferentes piezas de un puzle al que se van añadiendo más detalles, secretos, episodios, revelaciones y personajes que rodean a los protagonistas y que conforman un cuadro cada vez más complejo, enredado y oscuro en el que el lector ira descubriendo cuál es la verdad de esta fascinante e inquietante historia teniendo siempre en mente que, como dice uno de los personajes de las novela: "El ser humano está siempre buscando nuevas formas de embaucar al prójimo".