martes, 13 de octubre de 2020

Julián Romero el de las hazañas

“Quinto Centenario de su nacimiento (1518-2018). Julián Romero fue uno de los soldados españoles más reconocidos del siglo XVI”

Edaf publica Julián Romero el de las hazañas, de Jesús de las Heras, una obra que nos acerca a la figura de uno de los héroes mas reconocidos en nuestra historia: Lope de Vega y El Greco le dedicaron parte de su obra. Premiado personalmente por Enrique VIII de Inglaterra y por Felipe II.  Manco, tuerto, cojo y sordo de un oído cayó fulminado desde su caballo cuando reemprendía el Camino Español hacia Flandes.



Jesús de las Heras. Maestro nacional, periodista por la escuela Oficial de Periodismo de Madrid y licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense. Docente en las Escuelas Aguirre de Cuenca, y redactor y corrector en el Diario de Cuenca, se trasladó a Madrid donde ha trabajado en diferentes medios de comunicación: Informaciones, Nuevo Diario y Estudio Abierto, de TVE, entre otros.

Durante diez años trabajó en el diario El País. Es coautor de varios libros de tipo documental: La España de los quinquis, El último año de Franco, El caso Mestre y Los chistes verdes españoles. Ganó el Premio Alfonso VIII de Novela 2001, de la Diputación de Cuenca, con Silencio en Belvalle. En 2016 publicó La misteriosa desaparición de Anyulis crónica de la muerte de una joven colombiana. En EDAF ha publicado La Orden de Calatrava, La Orden de Santiago, Alfonso VIII el de las Navas y La espada. Fuerza y poder.

¿Se acuerda alguien del conquense Julián Romero de Ibarrola? Nació hace cinco siglos. Fue uno de los soldados españoles más famosos del siglo XVI. Un hombre que, desde su adolescencia, pasó la mayor parte de su vida junto a la muerte, matando en la lucha y evitando ser muerto. Dicen que vivió con honor y valor hasta el último día. Fue muy apreciado por la mayoría de quienes lo conocieron, admirado y temido por sus hazañas.

A pesar de graves episodios como una matanza en Naarden (Holanda) en 1572 o el incendio de la ciudad belga de Amberes en 1576, sobre los cuales aún se debate su grado de responsabilidad, es tratado con respeto e incluso benevolencia por los historiadores, incluidos los holandeses.articipó descisivamente en las batallas de Pinkie Cleugh, San Quintín, Gravelinas, Malta, Jemmingen, Mons y Mook, entre otras, y estuvo a las órdenes del duque de Alba en los hechos de Naarden, Amberes y Bruselas.

Con cincuenta y nueve años era cojo, manco, tuerto y sordo de un oído, no había vuelto a pisar tierra española desde hacía doce años, había recorrido todo el escalafón militar —desde tamboril a maestre de campo general—, había luchado en todos los frentes europeos, su valor había sido reconocido en persona por Enrique VIII de Inglaterra y por Felipe II. Una vez más, reclamado por don Juan de Austria, reiniciaba el Camino Español desde Lombardía a Flandes. El 13 de octubre de 1577 cayó fulminado desde su caballo.

No hay comentarios: