La noche del Tamarindo, de Antonio Gómez Rufo (Booket), es una novela completa que lo tiene todo para hacernos disfrutar con su lectura y llevarnos a importantes reflexiones.
El protagonista de la historia es Vinicio Salazar, un multimillonario español que poseía una de las mayores fortunas del mundo. Lo tiene todo a nivel material, pero le falta lo más importante. Vive solo con su hija Belén en Madrid, después de la muerte de su esposa. Aparte de su hija, no tiene otros parientes, tampoco amigos de verdad. Con 64 años, cuida su salud y su aspecto físico y tiene una constante vital: curiosidad por todo y por todos.
Cuando su hija Belén enferma de cáncer, la vida de Vinicio da un vuelco radical. Comienza una lucha por la vida de su hija convencido de que puede vencer, ya que es “un triunfador que nunca se había resignado a perder y esta vez tampoco se estaba conformando”. Vinicio emprende acompañado de su hija para celebrar su 30ª aniversario, con el deseo de aliviar su culpa por haberla desatendido y haber estado dedicado únicamente al trabajo. Intenta recuperar la relación con su hija. Vinicio teme aterrado el momento en que la pierda e intenta “comprar” su salud con dinero. Vinicio siente que la enfermedad de su hija es un castigo por haber vivido sin principio moral alguno, sin el necesario sentido de la responsabilidad.
Las primeras 100 páginas del libro son electrizantes, impactantes y muy emotivas. Después de un trágico accidente, comienza una trama policial, en la que Vinicio inicia una nueva vida en el anonimato. Es una nueva oportunidad de partir de cero e intentar vivir sin culpa ni remordimientos, aunque nada saldrá como él había planeado.
Salazar conoce a un doctor sin escrúpulos que le ofrece la posibilidad de prolongar indefinidamente la vida. Vinicio teje un juego ”sin ley ni moral, sin derechos ni deberes”, acompañado de un guardaespaldas sanguinario que le dará más de un disgusto y alguna sorpresa final, Vinicio comienza su nueva vida.
En la mitad del libro entrará en liza otro personaje fundamental en la trama, María Saldanho, inspectora de policía de Brasil. María está convencida de que Salazar es el asesino de su hermano y comienza una caza en busca de venganza, aunque no está preparada para lo que va a encontrar.
“La noche del Tamarindo” está narrada de forma exquisita con un ritmo vibrante y con un toque de humor negro que envuelve toda la novela. Sus personajes son estrafalarios y patéticos en búsqueda de un sentido a su vida. Además, debajo de una trama policial se esconde una dura crítica a la sociedad actual y a los abusos cometidos sobre los más necesitados. Con el dinero se puede conseguir muchas cosas, menos lo más importante, porque “La riqueza es la trampa de la sociedad para conservar al ser humano sumido en la esclavitud”.
La novela nos enfrenta a varios dilemas planteados por los avances científicos y nos hace reflexionar con inquietantes interrogantes:
¿Se puede conseguir el amor y la felicidad sólo con dinero?
¿Estaríamos dispuestos a vender nuestra dignidad con dinero?
¿Qué es lo verdaderamente importante en la vida?
¿Vale la pena prolongarla en un mundo como el actual?
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