“Presagios”, de Karin Fossum (ed. Mondadori, 2011) es una novela policíaca diferente, una historia contada con brevedad y sencillez que esconde un relato inquietante y perturbador.
La novela se desarrolla en una pequeña localidad rural de Noruega que vive apaciblemente el final del verano. La tranquilidad de sus habitantes se verá perturbada por una serie de sucesos inquietantes que comenzarán a sucederse de forma alarmante. Los dos primeros episodios resultan confusos. Por una parte un bebé de 8 meses aparece cubierto de sangre, cuando los padres acuden a urgencias comprueban con asombro y alivio que el bebé está ileso y la sangre no es suya. El siguiente suceso tiene como protagonista a una anciana de 70 años lee su propia esquela que alguien ha publicado en el periódico.
Sejer, el inspector jefe de policía será el encargado de investigar lo que parecen ser una serie de bromas macabras. La aparición en su casa de un mensaje anónimo anunciando que “el infierno empieza ya”, le hará comprender que se encuentran ante un desequilibrado cuya maldad puede ir en aumento.
Desde el comienzo de la novela el lector sabe quién es el causante de todo y cuáles son sus motivaciones. Estamos ante una mente enferma que está dispuesta a sembrar la población de terror, espanto e indignación. El interés de la novela no radica en quién es ni en por qué lo hace, sino en descubrir hasta dónde está dispuesto a llegar y qué consecuencias tienen sus acciones entre los amables habitantes de la población.
Conforme avanza la narración las víctimas y sus familiares verán trastocadas sus vidas, se enfrentarán al miedo y a la sensación de inseguridad, algo que se contagiará entre los habitantes. El propio protagonista tendrá que afrontar sus propios fantasmas mientras intenta descubrir un nexo de unión entre las víctimas o un cabo suelto que les lleve hasta el culpable.
La novela es de una sencillez pasmosa, no hay grandes fuego de artificio ni giros sorprendentes en la narración, no es necesario, el interés de la lectura se mantiene hasta el acertado final.
Por el camino asistiremos a un desfile de vidas rotas, por una parte, y de relaciones idílicas que se verán trastornadas por la obra de un perturbado, por otra. La historia nos lleva a reflexionar también sobre la venganza y sobre el papel que los medios de comunicación juegan al cubrir este tipo de noticias, siguiéndoles el juego en muchos casos a los delincuentes.
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1 comentario:
Karin Fossum es, para mí, una de las mejores escritoras de novela policiaca escandinava. Destaca claramente sobre los demás, junto con otros pocos autores. Estoy deseando leer su nueva obra. Gracias por comentarla. Saludos.
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