"Firmin", la historia de una rata devoradora de libros

“Nunca he estado muy bien de la cabeza, pero a loco no llego”

Firmin, el menor de las 13 crías de la rata Flo, es el personaje protagonista de la divertida y original novela “Firmin. Aventuras de una alimaña urbana”, de Sam Savage (ed. Seix Barral, 2007).

Firmin fue la única que nació con los ojos abiertos, demostrando ya su extraordinaria capacidad para la lectura. . Era el más pequeño y siempre se quedaba marginado y sin poder comer. Fue un milagro que saliera vivo de su familia.

Todos vivían en el sótano de la librería Pembroke. Firmin comenzó siendo una rata devoradora de libros en el sentido literal, porque se zampaba todos los libros que caían en sus manos, mejor dicho, en sus garras. Degustaba cada libro, cada páginas, cada frase, distinguiendo los diferentes sabores.

Su nueva pasión desenfrenada le llevó a leer mientras se comía los libros. De esta forma, cada vez leías más y masticaba menos, “para terminar pasándome prácticamente todas las horas de vigilia leyendo y comiéndome sólo los márgenes”.

Cada vez iba aprendiendo más de los libros y adquiriendo más cultura y conocimiento. Todos los miembros de su familia se terminaron yendo de la librería hasta que sólo quedó él.

Siente una atracción no correspondida por Norman, el dueño de la librería “un Sherlock Holmes que adivinaba el carácter de las personas por su aspecto. Sabía al primer vistazo el tipo de libro que iba a gustar a una persona, y nunca se equivocaba” y establece una entrañable relación con Jerry Magoon, un escritor fracasado.

Firmin es un soñador, pero también sabe “poner las cuatro patas en la tierra”, cuando hace falta. Es terco y persistente y lucha por ganarse el favor de los humanos. Pero su vida está llena de decepciones tanto entre los de su misma especie como entre los seres humanos, aunque encuentra sentido rodeado de aquellos que nunca le fallan, los libros.

Un libro homenaje a todos los "devoradores de libros".

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